Relleno
Cebolla 1
Aceite de oliva
Espinacas cocidas 500 g
Sal y pimienta
Tomates confitados 150 g
Panceta ahumda 200 g
Queso provolone 150 g
Masa
Harina 0000 1 kg
Sal 20 gramos
Levadura 25 g
Materia grasa 40 g
Agua 600 cc
Harina 1 cda
Relleno
Picar finamente la cebolla.
Saltearla en una sartén con una pequeña cantidad de aceite de oliva, junto con la espinaca picada; salpimentar. Retirar
del fuego e integrar los tomates confitados, la panceta ahumada cortada en juliana y 100 g de queso provolone rallado.
Masa
Combinar la harina con la sal.
Esparcir por encima de la levadura desgranada.
Unir la materia grasa y el agua.
Amasar muy bien hasta que la masa resulte elástica. Dividirla en 4 bollos.
Dejar leudar en un lugar cálido.
Desgasificar.
Estirar la masa formando un cuadrado.
Colocarlo en una placa pintada con aceite.
Marcar la diagonal con el dedo, para determinar dos superficies triangulares.
Sobre una de ellas extender la preparación de espinaca. Doblar la masa por la diagonal marcada, para cubrir el relleno
y formar un triángulo.
Sellar los lados abiertos y, si se desea, hacer un repulgo.
Pintar con aceite la superficie de la pizza rellena. Espolvorear con el resto del queso rallado y con la harina. Cocinar
en horno a 180°C hasta que esté bien dorada y
crocante.
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