1 manojo de espinacas 500 g
50 g de aceitunas negras (kalamata)
1/2 porción de salsa de pizza
4 panes pitas redondos de 17 cm
1/3 taza de pasas
1/4 taza de piñones
200 g de queso feta

Precaliente el horno a 210ºC.
Elimine los tallos de la espinaca y lave bien las hojas en agua fría.
Póngalas empapadas de agua en una cazuela grande, tápela y cuézala grande, tápela y cuézalas a fuego lento hasta que se ablanden; remueva de vez en cuando.
Retírelas del fuego y deje enfriar.

Escurra bien las espinacas y córtelas en jualiana.
Quite los huesos a las aceitunas y córtelas en cuartos.
Extienda la salsa de pizza sobre los panes pita y reparta las espinacas por igual sobre la salsa.

Esparza sobre las espinacas las aceitunas, las pasas y los piñones.
Desmenuce el queso por encima y ponga las pizzas en bandejas de horno.
Métalas en el horno durante 15 minutos, o hasta que el queso esté dorado y las bases crujientes.
Sírvalas inmediatamente.