2 patatas medianas, sin pelar, cortadas en 8 cuñas
aceite para untar
sal
1 pimiento rojo grande
375 g de langostinos medianos (12 unidades)
2 cucharadas de aceite de oliva extra
3 dientes de ajo majados
1 guindilla roja pequeña picada fina
1 base fina de pizza
125 g de mozzarella cortada en lonchas finas
1/4 taza de albahaca fresca en tiras

SALSA

50 g de tomates secos
1 taza de agua hirviendo
1 tomate mediano maduro, pelado, sin semillas y picado
2 cucharadas de aceite de oliva

Precaliente el horno a 210ºC.
Unte los trozos de patata con aceite, póngalos en una bandeja de horno y écheles sal.
Hornee las patatas durante 30 minutos hasta que estén hechas por dentro.
Déjelas enfriar un poco, separe con una cuchara la carne de las pieles y reserve aparte éstas.

Corte el pimiento por la mitad y quíteles las semillas y la membrana.
Gratínelo en una bandeja con la piel hacia arriba de 5 a 7 minutos, o hasta que la piel se hinche y se ponga negra.
Sáquelo del horno, tápelo con un paño limpio y déjelo enfriar; luego quítele la piel y corte la carne en tiras de 1 cm.
Resérvelo.

Pele los langostinos dejando el final de la cola y desvénelos.
Caliente el aceite en una sartén antiadherente y sofría el aho y 1/2 cucharadita de la guindilla durante 1-2 minutos.
Eche los langostinos y fríalos a fuego medio durante 1 minuto por cada lado.
Retírelos y resérvelos.

PARA LA SALSA

Ponga los tomates secos y el agua hirviendo en un cuenco pequeño; déjelos en remojo 8 minutos para que se ablanden y escúrralos.
Póngalos con el tomate picado y el aceite en la batidora y bata hasta obtener una pasta homogénea.

Extienda la salsa sobre la base de pizza y coloque las lonchas de mozzarella sobre la salsa.
Ponga encima los langostinos, las tiras de pimiento y las cáscaras de patata.
Espolvoree generosamente con la albahaca en tiras y el resto de la guindilla.
Hornéela durante 35 minutos hasta que la masa esté dorada, córtela en cuñas y sírvala inmediatamente.